RELIGIÓN
El sentido de pertenencia es algo que forma parte de manera intrínseca de cada uno de nosotros, tanto es así que tendemos a hacer grupos con el fin de formar parte de algo mayor. La presencia de una pertenencia asume de manera automática un rol, dicho rol cambia dependiendo del grupo en el cual nos encontramos, una persona desempeña numerosos roles en su vida que pueden ser temporales o para toda la vida, diferenciamos de esta forma las etapas vitales que dependen en gran medida de aquello que nos rodea. En conclusión, nunca somos exactamente iguales ni nos comportamos de la misma manera, por este motivo es tan complicado responder a la pregunta de ¿Quiénes somos?, sin embrago aquellos que te conocen dirán que saben cómo eres, y nadie te conoce tan bien como tu madre, la respuesta real reside en cierta manera en nuestras raíces aquello que nos viene heredado y que será inmutable a lo largo del tiempo de nuestra existencia, por mucho que se prolongue.
Hoy en día nos encontramos frente a una realidad muy difícil, un mundo totalmente convulsionado que ha prescindido de Dios, en el cual se encuentra el hombre, quien ha perdido de vista su verdadera identidad y la vocación para lo que ha sido creado, el cual está llamado a ser santo y a alcanzar la vida eterna, pero que frente a un relativismo profundo en el cual se vive le impide ver con claridad este objetivo primordial, que es precisamente la felicidad, la cual se obtiene acogiendo y aceptando la única verdad plena que es Cristo, quien es capaz de iluminar todo cuanto existe dentro y fuera del hombre;, ya que al haber sido creado por Dios tiene en lo profundo de su ser esta huella de su Creador que lo llama hacia Él.
Una de las mayores paradojas es pedirle dones a quien no tiene ni anima (voluntad)
